• Fajã da Ovelha

Como ocurre con muchos distritos de la isla, este pueblo se desarrolló a partir de una gran concentración de habitantes alrededor de una pequeña capilla.

Los estrechos y escarpados caminos y callejuelas que zigzaguean toda la villa con sus típicas casas y hermosos jardines harán las delicias de los visitantes curiosos.

Parte del pueblo se asienta en una roca que, según la tradición, está protegida por san Amaro, para que Fajã da Ovelha no caiga sobre el pueblo de Paul do Mar, en la costa.