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Madeira posee índices muy bajos de criminalidad y lo peor que le pueda pasar es que amanezca con quemaduras solares o resaca. La violencia contra los turistas se da muy rara vez.
Los carteristas y los tirones de bolsos no suelen ser un problema, sin embargo, como en cualquier lugar del mundo moderno, hay que tener cuidado con las personas que se le acercan demasiado o con los empujones. Asimismo, hay que controlar en todo momento los bolsos o las cámaras fotográficas. El sentido común siempre le ahorrará todo tipo de contratiempos.
Si es usted víctima de un robo, debe informar enseguida a la policía y conservar la denuncia si quiere reclamar a su seguro. Si le roban el pasaporte o lo extravía, debe contactar con su consulado para que le expidan un duplicado.
No encontrará muchos contratiempos en Madeira. Quizá el típico coche mal aparcado o el mosquito de turno en la época más calurosa del verano, pero nada que altere gravemente sus vacaciones.
