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Históricamente, el Puerto de Funchal existe desde finales del siglo XIX, aunque la construcción de la moderna infraestructura portuaria en sí misma se completó solo a comienzos del siglo XXI. Durante la colonización del archipiélago, por ejemplo, la carga y descarga de mercancías y pasajeros se realizó directamente sobre el guijarro, estando fuertemente condicionado por el estado del mar.
Debido a la posición geográfica estratégica de Madeira, en el centro del Océano Atlántico, cerca de las Islas Canarias y África del Norte, hasta la Segunda Guerra Mundial el Puerto de Funchal era un punto de escala para los grandes buques, que solían detenerse aquí durante sus rutas entre Europa y el Continentes americano y africano Así, en el siglo XX, además de ser un importante lugar de comercio, con la carga y descarga de bienes y pasajeros, ganó gradualmente relevancia turística. Actualmente, el principal puerto de la isla de Madeira es especialmente conocido por dar la bienvenida a muchos cruceros, que se detienen aquí y luego continúan su viaje a otros destinos.
El centro de la ciudad de Funchal se encuentra a poca distancia de la Terminal Marítima Internacional de Pasajeros (Gare Marítima Internacional do Porto do Funchal), una infraestructura que es extremadamente relevante para el segmento de cruceros cada vez más competitivo.
Situado en el muelle de Pontinha, en una bahía natural rodeada por el mar azul y las verdes montañas, es imposible no dejarse impresionar por las impresionantes vistas al llegar por mar: además de una increíble perspectiva de toda la ciudad, queda claro que esto es una isla floreciente que se eleva espectacularmente desde el océano hacia las nubes. La construcción moderna de la terminal ofrece más comodidad, así como mejores condiciones de acceso y seguridad para quienes llegan a la isla. Por lo tanto, un gran número de pasajeros de cruceros puede embarcar y desembarcar de manera más rápida y eficiente de acuerdo con las normas de seguridad internacionales.
Este puerto está muy ocupado en los meses de verano, así como en octubre y, por supuesto, en diciembre, siendo el día 31 el más activo del año, ya que muchos cruceros eligen la bahía de Funchal, ya embellecida por el alumbrado navideño, como el etapa de los fuegos artificiales de fin de año.
El puerto de Funchal también acoge a Lobo Marinho, el ferry que todos los días asegura la conexión marítima entre las islas de Madeira y Porto Santo, con una duración de 2 horas y 20 minutos y la posibilidad de transportar vehículos.
