Esta playa está situada en la zona homónima. Con una atmósfera familiar, esta playa (cuyo nombre en español sería Piedras Negras) es visitada básicamente por lugareños, pero por supuesto, si te gusta este lugar, el acceso es gratuito como en toda la extensión de la playa.

Esta playa atrae a mucha gente por sus aguas limpias y cálidas. No posee muchas instalaciones pero cuenta con socorrista, una ducha improvisada, puesto de socorro, un bar con una pequeña terraza y, si llega pronto, podrá disfrutar de una sombrilla.

La Playa de Calheta es uno de los rincones más especiales de la isla. Esta tierra árida y pedregosa le empuja hacia el mar. La playa es una mezcla de piscinas naturales y dunas con aguas cristalinas, además de una zona de juegos perfecta para los niños.

El contraste del mar azul con los tonos ocres de las rocas, la impresionante vista del Islote de Cal y la tranquilidad de la zona dan a la playa un ambiente extra terrenal.

Esta playa situada al extremo oeste de la isla posee Bandera Azul, lo que confirma sus excelentes condiciones e instalaciones (vestuarios, casilleros, servicio de restauración, servicio de socorristas, puesto de socorro y aparcamiento).

La Playa de Fontinha es probablemente la más querida por los habitantes de Madeira. Tanto los isleños como los turistas buscan esta playa en la llamada Isla Dorada.

Tiene 720 metros de longitud, comienza en Cais Velho (el Muelle Viejo) y termina cerca del hotel Torre Praia, lindando con la Praia das Pedras Pretas. Ofrece, como casi todas las playas de Porto Santo, condiciones naturales únicas. La arena fina; las aguas limpias, tranquilas y tibias (posee la Bandera Azul); las largas horas de sol y su belleza natural son solo algunos puntos destacables con los que cuenta.

Otras instalaciones son vestuarios, casilleros, sombrillas, tumbonas, puesto de socorro, restaurante y aparcamiento. Hay un camping muy cerca.

Situada en la zona de hoteles, la Playa de Cabeço está visitada principalmente por turistas que saben de las propiedades terapéuticas de su arena.

A 4 km del centro de Vila Baleira, rodean esta playa los complejos de grandes hoteles, donde podrá disfrutar de un excelente alojamiento y muchas actividades de ocio. También encontrará servicios de restauración. Los niños pueden jugar en la guardería cerca de las dunas y entre sus instalaciones se incluye un servicio de socorrista, lancha de salvamento y puesto de socorro.

La Playa de Cabeço no tiene aparcamientos públicos, solamente los privados dentro de los hoteles, así que le recomendamos que estire las piernas y vaya caminando a la playa. Porto Santo es un lugar ideal para caminar.